El uso terapéutico del óxido nítrico inhalado es parte del tratamiento para hipertensión pulmonar, ya que se fundamenta en su capacidad para lograr una vasodilatación pulmonar potente y sostenida, sin reducir el tono vascular sistémico de modo significativo, mejorando el flujo sanguíneo y oxigenación de los tejidos.
También se emplea con frecuencia en terapia pulmonar para neonatos y adultos, con enfermedades crónicas como EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).